El telescopio espacial Hubble ha detectado una diminuta galaxia, una de las más antiguas conocidas, situada a más de 13.000 millones de años luz. El objeto cósmico existió en un época en la que el Universo solo tenía 500 millones de años.
El equipo de investigadores responsables del hallazgo, coordinados por el astrofísico Adi Zitrin, del Instituto Tecnológico de California, estima que solo mide 850 años luz, esto esto, es unas 500 veces más pequeño que la Vía Láctea. Además, su masa es de apenas 40 millones de soles, cuando la de nuestra galaxia es de varios cientos de miles de millones.
Para localizar esta antiquísima galaxia, los expertos utilizaron el enorme cúmulo Abell 2744 como lente gravitacional. Este es tan masivo, que su gravedad curva la luz, como si fuera una lupa cósmica. Esto permite avistar las estructuras estelares muy lejanas situadas tras él –en las imágenes del Hubble, aparecen varias de ellas en las cajas a, b y c–, que se muestran mucho más grandes y brillantes de lo normal.
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